Cantabria activa el nivel de preemergencia por el temporal de lluvia y los fenómenos costeros adversos

El Gobierno autonómico informa a todos los ayuntamientos, organismos de emergencia y a la población, al objeto de que permanezcan atentos a la climatología y adopten las medidas preventivas

El Gobierno autonómico ha activado el Plan Territorial de emergencias de protección civil de Cantabria (PLATERCANT) en fase de preemergencia y situación de alerta por el temporal marítimo que comenzará en las próximas horas con motivo de la interacción de un anticiclón y una borrasca que dará lugar a un temporal marítimo, de viento, de nieve y de lluvia.

Las previsiones efectuadas por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) prevén desde esta medianoche un riesgo importante por lluvia en el centro, el valle de Villaverde y el litoral, donde también se activará el aviso naranja por fenómenos costeros adversos, que dejarán olas de hasta 8 metros, y la alerta amarilla por viento fuerte de hasta 90 kilómetros por hora en la costa, tanto el lunes como el martes.

También se esperan precipitaciones acumuladas de hasta 80 litros por metro cuadrado, tanto en el litoral como en el centro de la región y el valle de Villaverde. Mientras, en Liébana, donde se activará la alerta amarilla por lluvias, se prevé que se acumulen hasta 40 litros de precipitaciones por metro cuadrado en 12 horas.

La consejera de Presidencia, Interior, Justicia y Acción Exterior del Gobierno de Cantabria, Paula Fernández Viaña, ha solicitado a la población extremar la precaución ante la llegada por el noroeste peninsular de dos consecutivos sistemas frontales.

"Mañana se esperan acumulaciones de entre 60 y 80 milímetros de precipitaciones en amplias zonas, alcanzando los 100 milímetros en el litoral y el centro de la región, a lo que hay que sumar las rachas de viento que comenzarán el día de mañana siendo muy fuertes en el norte, dando lugar, además, a un temporal marítimo en el área cantábrica, con olas de entre 6 y 8 metros", ha explicado Fernández Viaña, quien ha avanzado que para el martes se espera una bajada de las cotas de nieve, sin descartarse a nivel del mar en el área cantábrica para el miércoles.

La activación del PLATERCANT en fase de preemergencia implica mantener informada a la ciudadanía de la evolución de los acontecimientos y alertar a los servicios de emergencia correspondientes y autoridades competentes que pudieran verse implicados por este episodio meteorológico.

En especial, el Gobierno de Cantabria ha dado trasladado a los municipios afectados con el fin de alertar al personal de los servicios municipales correspondientes; delimitar y acotar zonas susceptibles de ser afectadas por las inundaciones y temporal costero; despejar las vías susceptibles de riesgo de inundación de vehículos, mobiliario urbano u otros elementos susceptibles de ser arrastrados, informar a los establecimientos y bajos a pie de calle que puedan verse afectados; retirar del exterior de la vivienda aquellos objetos que puedan ser arrastrados por el agua; establecer prohibiciones, en especial de estancia o estacionamiento, en zonas con riesgo; prever la localización de albergue provisional en caso de evacuación de zonas con riesgo inminente, y adoptar cualquier medida preventiva que resulte necesaria en el ámbito territorial del municipio frente a temporales costeros, nevadas e inundaciones que pudieran afectarles.

Asimismo, se recomienda a la población tomar todas las medidas de autoprotección necesarias frente a temporales costeros e inundaciones, como seguir al pie de la letra las instrucciones de los equipos de emergencia, como bomberos o Protección Civil; disponer de una linterna y un pequeño kit de emergencia con radio a pilas; crear diques de contención con sacos de arena o similar en caso de vivir en zonas potencialmente inundables; hacer acopio de agua limpia y potable; retirar del exterior de la vivienda aquellos objetos que puedan ser arrastrados por el agua; revisar, cada cierto tiempo, el estado del tejado, el de las bajantes de agua y los desagües próximos, y colocar los documentos importantes y, sobre todo, los productos peligrosos, en aquellos lugares de la casa en los que la posibilidad de que se deterioren por la humedad o se derramen sea menor.

Si llegara a inundarse la vivienda, es fundamental abandonar cuanto antes los sótanos y plantas bajas y desconectar la energía eléctrica utilizando, preferentemente, linternas para el alumbrado, y en caso de evacuación o inundación, cortar la corriente eléctrica de la vivienda, y cerrar las llaves de paso de agua y gas.

En el exterior, no estacionar vehículos ni acampar en cauces secos, ni a la orilla de ríos y costa, para evitar ser sorprendido por la súbita crecida de agua o por una riada, y en caso de tener que viajar, procurar circular por carreteras principales y autopistas.

Además, se aconseja evitar con el coche zonas de vaguada que puedan verse afectadas por una riada y no atravesar los tramos que estén inundados, ya que la fuerza del agua puede arrastrar y hacer flotar el vehículo; alejarse de los ríos, torrentes y zonas bajas de laderas y colinas, para evitar ser sorprendido por una súbita crecida de agua o por una riada; localizar los puntos altos más próximos, y mantenerse de manera permanente informado de la situación, las predicciones meteorológicas y del estado de las carreteras.
En el caso de situaciones de nevada, se aconseja estar informado previamente del estado de las carreteras y de la situación meteorológica; evitar viajar en coche siempre que no sea necesario y utilizar, a ser posible, transporte público; revisar neumáticos, anticongelante y frenos; llenar el depósito de la gasolina y llevar cadenas y elementos de abrigo, además de un teléfono móvil y su correspondiente dispositivo de alimentación.
Se recomienda tener especial cuidado con las placas de hielo y en caso de quedar atrapado, mantener el motor del vehículo encendido y la calefacción puesta, renovar cada cierto tiempo el aire y mantener libre, en todo momento, la salida del tubo de escape.

Finalmente, evitar realizar excursiones a la montaña y en caso de realizarse, informarse de la predicción meteorológica, elegir la zona adecuada, informar de la localización de los refugios o cabañas para resguardase, prestar atención a las indicaciones de los carteles sobre riesgos de la montaña y tener en cuenta los cambios bruscos de tiempo que son frecuentes en la montaña.