El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha advertido de que la “guerra económica” derivada de la invasión rusa a Ucrania puede traer “consecuencias catastróficas” y ha pedido a la Unión Europea medidas urgentes para paliar esta situación “insostenible ya hoy y previsiblemente más insostenible mañana” que, de continuar en esta línea, llevaría “a la ruina y el caos absoluto”.

“El precio de la energía, si sigue así, se carga prácticamente toda la industria y también el turismo. Se carga todo”, ha dicho Revilla al inicio de la reunión de la Alianza por la Industria de Cantabria, convocada por el Gobierno regional para analizar la repercusión en el sector del conflicto bélico.

El jefe del Ejecutivo regional considera que “hay instrumentos” para devolver los precios de la energía a los niveles “razonables” de hace 8 o 9 meses y ha apuntado directamente a la necesidad de cambiar la resolución europea que estableció el precio del gas como referencia del coste energético. En todo caso, ha señalado que “es momento de grandes decisiones” por parte de Europa, ya que, en su opinión, cualquier medida que pudieran adoptar España o Cantabria serían meros “parches”.

“Cantabria tiene un consumo en empresas electrointensivas brutal y ya estamos viendo consecuencias de paros, EREs, etc. El transporte anuncia huelgas, todos los productos llevan una cascada de incrementos, la inflación se va a disparar… Hay una guerra, pero la guerra económica que estamos padeciendo ahora puede tener unas consecuencias catastróficas y las medidas que se tomen tiene que ser de ámbito europeo. No tenemos capacidad en una comunidad autónoma y en un país, salvo algún parche, de poner remedio esta situación”, ha enfatizado Revilla, que llevará esta preocupación a la Conferencia de Presidentes del próximo domingo en La Palma.

El jefe del Ejecutivo, que ha vuelto a solidarizarse con el pueblo ucraniano y a condenar la “invasión atroz” de Rusia, ha confiado en que Europa, “que ahora es una piña” y está “fortalecida y unida”, actúe como lo ha hecho a lo largo de la pandemia y ponga a disposición de los estados miembros “recursos extraordinarios” que ayuden a mitigar los efectos de esta crisis energética que, a su juicio, pone en riesgo la incipiente recuperación económica.

Finalmente y pese a la sensación de “pesimismo y desmoralización” que cunde en estos días, ha confiado en que se consiga alcanzar una solución y ha reiterado el apoyo del Gobierno al tejido productivo regional en la medida de sus posibilidades.

En la misma línea se ha pronunciado el consejero de Industria, Javier López Marcano, que ha llamado a las instituciones y colectivos representados en la Alianza por la Industria a trabajar en soluciones –“pequeñas soluciones en nuestro caso”- y ha adelantado que el Gobierno prepara nuevas líneas de ayudas que, tal y como ha matizado, “no serán suficientes para resolver la situación, pero sí pueden mínimamente ayudar a paliarla y también a que los empresarios e industriales sientan la tutela y la proximidad de su administración más cercana”.

Asimismo, Marcano ha agradecido la respuesta de la Alianza por la Industria a esta reunión convocada por el Ejecutivo autonómico con tintes de “comité de crisis”.

También han asistido, en representación de la Consejería, los directores generales de Industria, Daniel Alvear, y de Innovación, quien, con posterioridad a las intervenciones del presidente y del consejero, ha moderado un coloquio sobre las afecciones económicas de la invasión rusa en el que han participado el director adjunto de Política Exterior y Relaciones Multilaterales de CEOE España, Álvaro Schweinfurth; el director de Internacional de la Cámara de Comercio de España, Jaime Montalvo, y Manuel Rivas, representante de la Dirección General de Energía de la Comisión Europea.

Para concluir la jornada se ha dado voz a representantes de diferentes clústeres sectoriales, al objeto de conocer de primera mano su visión de la actual coyuntura energética, y se ha abierto un turno de preguntas entre los asistentes.

Alianza por la Industria

La Alianza por la Industria de Cantabria nació en junio de 2021 como instrumento para garantizar la supervivencia, la modernización y el fortalecimiento de un sector esencial para el tejido económico de la Comunidad Autónoma, aumentar su peso futuro en el PIB regional y su nivel de empleabilidad, y defender a las empresas electrointensivas ante la preocupante subida de precios de la energía.

Están representados en este órgano el Gobierno de Cantabria, el Parlamento (todos los grupos excepto Vox, que no quiso sumarse), la Federación Cántabra de Municipios, la Universidad de Cantabria, CEOE CEPYME, los sindicatos CCOO y UGT, las Cámaras de Comercio de Cantabria y Torrelavega, la Autoridad Portuaria de Santander y los Colegios Oficiales de Ingenieros Industriales y de Ingenieros Técnicos Industriales, entre otras entidades.